Así, a mi modo...

Por donde comenzar amada mía
las palabras tropiezan torpemente
hoy quiero confesarte mi alegría
mas se enrarece el mar aquí en mi mente

No existe en esta vida quien pudiera
a mis ojos cegar de complacencia
ni el candor de una flor en primavera
como lo hace el calor de tu presencia

Como logran hacer tus claros ojos
y unos labios de miel que me enloquecen
volviendo a renacer de mis despojos
en renuevos de amor que por ti crecen

En esta carta quiero confesarte
que le he pedido a Dios tener talento
para que puedas ver que en mi encontraste
la pasión que anheló tu pensamiento

Que si el sol es la luz de nuestra historia
la alegría de vivir dándose entero
tu eres alusión de la victoria
me tornas ganador, el más certero

Un laurel a mi sien, un aderezo
que colma de sabor a mis sentidos
me has mostrado el amor con sólo un beso
y a mis venas hervir con tus latidos

Eres pues la razón de mis razones
la magia del creador que puede todo
la bondad que anidó en los corazones
te lo quise expresar así, a mi modo.

Salvatore*